Internet no está hecho para leer. Está hecho para transmitir información vertiginosamente, o para acceder a ella con la misma velocidad. Su eficacia está en encontrar rápido, leer rápido y cambiar más rápido aún. Es lo que se llama surfear, hacer surf en la red.

¿Quién va a leerse La montaña mágica en Internet? Si lo que sé de psicología y de sociología de la informática no me engaña, se están consolidando dos clases intelectuales: los que leen con lentitud, y los que leen vertiginosamente. Y, aunque no lo parezca, los lectores lentos llevan las de ganar. No me estoy refiriendo a la velocidad material de lectura, sino al modo de enfrentarse con textos largos y complejos.

Internet -lo sé por experiencia- presiona para que se transmitan textos fulgurantes y brevísimos. Pero al acortar el mensaje dejamos fuera de juego los temas más importantes: la argumentación y la sutileza.

Te recomiendo que leas con calma. Y que no caigas en la trampa de creer que una imagen vale más que mil palabras. Es una peligrosa mentira. La lectura lenta no es importante porque proporcione una mayor elocuencia, o una expresión más refinada o elegante. Es importante porque nuestra inteligencia es estructuralmente lingüística, y nuestro ámbito vital también lo es.

Mediante el lenguaje manejamos todos nuestros procesos inteligentes. Tal vez recordéis que en la escuela os decían que en la comunicación lingüística hay un emisor (el que habla), un receptor (el que escucha) y un mensaje (lo que se transmite). Esto es verdad, pero no toda la verdad.

¿No os habéis dado cuenta de que nos estamos hablando a nosotros mismos continuamente? ¿Por qué lo hacemos? Porque es el procedimiento que hemos aprendido para manejar nuestros recursos mentales. Nos hacemos preguntas. ¿Para qué? ¿Quién pregunta? Yo. ¿A quién? A mi. ¿Quién va a responder? Yo otra vez. ¡Qué comportamiento más estúpido! Pues no; así es como dirigimos nuestra memoria.

Además, vivimos en un ámbito lingüístico. Alrededor del 80% de los problemas de pareja tienen que ver con el lenguaje. No hablamos, no hablamos de ciertas cosas, o no nos entendemos. ¿Por qué se dan tantas incomprensiones y malentendidos? Porque hemos descuidado el lenguaje.

La imagen tiene un poder emocional fabuloso, pero no lleva al entendimiento. Las grandes creaciones del espíritu humano: la argumentación, la lógica, el derecho, el ingenio, la poesía, la ciencia, las declaraciones de amor, son creaciones lingüísticas.

Te lo aconsejo, busca información vertiginosamente en Internet, y luego léela reposada, fructífera, inteligentemente en tu sillón.

José Antonio Marina

4 Comments

Un mundo complejo - E. Pampliega

Sin duda intentar leer a Thomas Mann en una pantalla de ordenador es de locos. Disfrutar de una buena lectura con tu libro entre las manos no tiene nada que ver con la red.

No conocía aprender a pensar pero ahora será un lugar de visita obligada.

Muy buen post.

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Alberto García

Internet sin duda no está hecho para leer, eso sí, sirve como una potente herramienta para encontrar qué leer. Cada día encuentro más libros interesantes a través de Internet, o algunas otras cosas como este sitio que añado a mis favoritos.

Alrededor del 80% de los problemas de pareja tienen que ver con el lenguaje, ¿sólo los problemas de pareja? yo creo que la mayoría de los problemas en el mundo parten de este punto, no hay nada tan cierto como que «hablando se entiende la gente».

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Guillermo Planas Girón

Estimado Sr José Antonio Marina.

Permítame comentarle brevemente la forma curiosa como me enteré de Ud. Fue a través de un interesante análisis crítico en la Sección «Críticas de libros», realizado por mi profesor en Dermatología Dr. Francisco Kerdel Vegas, en su interesante Blog: bitacoramedica.com, con motivo de su importante ensayo:»Los sueños de la razón» (2003), donde analiza de la forma más descarnada y realista el concepto de revolución, ejemplificada en la revolución francesa y las enormes repercusiones con que estos movimientos marcan el destino y la suerte de las naciones. Ya revisé en Wikipedia algunos de las interesantes títulos de su producción, que me dispongo a adquirir, entre ellos: 1) «La selva del lenguaje»(2002); 2)»El vuelo de la inteligencia» (2000); «La inteligencia fracasada. Teoría y práctica de la estupidez»; «La magia de escribir»; «Elogio y reputación del ingenio»; y «La lucha por la dignidad». Los seleccioné porque tengo la sensación que por sus sugestivos títulos, seguramente serán excelentes ensayos, como el analizado por el Dr. Kerdel Vegas.

En relación con el tema que encabeza su columna: «Surfear no es igual que leer» (refiriéndose a Internet), permítame decirle que coincido ciento por ciento con Ud y así se lo escribí en una ocasión al poeta Francisco Montoya en ocasión de su escrito titulado «Nuestros olvidados libros», en un Blog de Enfermedades cutáneas y otros temas más (Piel-L.org), y que transcribo textualmente para Ud. donde destaco la diferencia de leer por Internet y gozar del placer de degustar un hermoso libro entre nuestras manos y manosearlo, sub-rayarlo, colocar anotaciones al pie o al borde de la página,releerlo, etc.

Este comentario le hacía al poeta en esa oportunidad:

Comentarios to “Dermatologia y arte 223”
Guillermo Planas Girón comentó:
Febrero 4th, 2009 at 0:46
REFLEXIONES PARA EL POETA FRANCISCO MONTOYA SOBRE EL TEMA: “NUESTROS OLVIDADOS LIBROS”

Estimado amigo Francisco: Voy a aceptar su cordial invitación a compartir algunas reflexiones sobre su interesante tema “Nuestros Olvidados Libros”, invitación implícita en la pregunta formulada: Qué piensa Ud. ?, al final de su interesante escrito.

En mi opinión los libros que atesoramos con tanto esmero y cuidado, trátese de literatura, arte o ciencias, son los testigos vivientes de nuestra formación integral; cómplices silenciosos y leales de tantos secretos, de tantas intimidades existenciales de nuestra vida. Conjuntamente hemos compartido historias, tratado los más diversos temas y dócilmente se han revestido de una infinita paciencia, esperando el momento en que decidamos tenerlos en nuestras manos y acariciarlos cual tiernos cachorros y someterlos al examen minucioso de nuestra ingente curiosidad, hojear sus páginas, deslizarlas entre nuestras manos, someterse estoicamente a los resaltes de ciertas ideas, frases, y pensamientos de interés, que realizamos con los resaltadotes luminosos modernos, y recibir con humildad las anotaciones que se nos ocurran a pie y al margen de la página.

A pesar de los impresionantes avances tecnológicos, entre ellos el ciberespacio, los libros han conquistado su irrenunciable lugar de honor en nuestras preferencias intelectuales. Se pensó en un tiempo que Internet, desplazaría la avidez por los libros, pero las estadísticas demuestran que existen cada día más lectores, aparecen nuevos escritores y autores, -algunos brillantes- que con su ingenio y sapiencia, alimentan nuestras almas sedientas de conocimientos y curiosidad. Sabe algo amigo Francisco ?. En mi caso particular he llegado a un punto de equilibrio entre la tecnología y las lecturas de mis invalorables libros; trato de alimentarme armoniosamente de estas dos preciosas fuentes del conocimiento y la cultura.

Y es así que recordamos a maestros, historiadores, literatos, músicos y en general los más dignos representantes de las expresiones del arte y del saber. Bien sea por Internet o por su legado de obra escrita, nos enteramos de las enseñanzas de un David García Bacca, quien pertenece al grupo de brillantes intelectuales como Pedro Grases, Ramón Menéndez Pidal, José Ortega y Gasset, Joan Corominas, Amado Alonso, Samuel Pili Gaya, Carlos Pi-Sunyer, Pedro Urbano, Angel Rosenblat, Mariano Picón Salas, Pedro Pablo Barnola y Fernando Paz Castillo, entre otros.

Muchos de ellos, al igual que David García Bacca, “maestros transhumantes”, pertenecen a la más amplia geografía del hispanismo español, hispanoamericano y venezolano.

Un sin número de ellos, dejaron obra fecunda y sembraron huella permanente en Latinoamérica y particularmente en nuestra querida Venezuela. Muchos de nuestros países hoy tan venido a menos, por obra y gracia de los “perfectos idiotas de Latinoamérica” y por los “fabricantes de miseria” como dirían Don Plinio Apuleyo Mendoza, Carlos Alberto Montaner y Alvaro Vargas Llosa, en sus dos excelentes obras: “Manual del Perfecto Idiota Latinoamericano” (1996) y “Fabricantes de Miseria” (1998).

Y me despido, tan solo con el primer verso de la Oda I: “Vida Retirada”, de Fray Luis de León, unos de los máximos representantes del Renacimiento Español:

¡Que descansada vida
la del que huye del mundanal rüido,
y sigue la escondida
senda, por donde han ido
los pocos sabios que en el mundo han sido;

Un saludo cordial,
Dr. Guillermo Planas Girón
Caracas-Venezuela
02 de Febrero de 2009

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erika

no termino de entender que quiere decir en el texto…
me lo podria explicar¿

un saludo cordial

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